La lucha de ideas en la “unidad política”

Analizando lo publicado recientemente en los medios locales (9 de octubre del  2017), someto a su consideración las siguientes inconsistencias:
    “Mi candidato será el que el partido postule”. Lo preocupante es que el criterio de selección es por encuesta, y todavía estamos sorprendidos de los resultados en las elecciones en Estados Unidos de Norteamérica,  donde el que encabezaba las preferencias, no fue el candidato ganador.
    “Los alcaldes y regidores deben evitar divisiones y pleitos, su responsabilidad política y social es con el pueblo”. Esta frase se contrapone a otra que dice: “Los funcionarios de gobierno están vinculados con la salida del actual dirigente estatal del PRD”.
    Leemos: “Con la salida del actual dirigente del partido, el grupo Nueva Izquierda puede apoderarse del PRD”, afirmación que se contrapone a la siguiente: “Que la militancia  de Nueva Izquierda no está de acuerdo con la permanencia hasta diciembre del dirigente estatal”.
    Y por último, una frase aglutinadora: “Somos gente representativa y debemos abonar a la unidad del partido”.
    Se habla del PRD, pero podría aplicarse a cualquiera de las formaciones políticas en las que la militancia y los ciudadanos reciben mensajes contradictorios, o por lo menos incompletos.
    Conclusión: El éxito de un partido, se logra a través del debate franco y permanente, que llevan a compromisos y acuerdos, donde la lucha de ideas preserva la unidad. Y la lucha con ideas.