En las elecciones locales del 1° de junio de 2025 en Veracruz, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), liderado por Alejandro “Alito” Moreno, quedó al borde de la desaparición electoral en múltiples municipios.
En localidades como Acula, el candidato priista apenas obtuvo un voto, muy por detrás del candidato de la alianza Morena?PVEM, que logró más de mil votos. Situaciones similares se dieron en Tenochtitlán, Tlacojalpan y Tlacotepec de Mejía, donde los abanderados del PRI recibieron entre uno y dos sufragios.
De los 212 municipios veracruzanos con elección, el PRI solo ganó en 23, frente a 84 para Morena?PVEM, 41 para Movimiento Ciudadano, 34 para Acción Nacional y 28 para el PT.
Este resultado representa un fuerte retroceso para el partido tricolor, que tras décadas de dominio perdió su hegemonía local y quedó relegado a un nivel marginal tras los comicios.
Alejandro Moreno, dirigente nacional del PRI, reaccionó asegurando que en Durango se demostró que sí era posible competirle a Morena y dijo: “Ya le ganamos. Y no solo eso: los aplastamos”.
