La reforma constitucional elimina el texto que reconocía y protegía el derecho a la vida «desde el momento de la concepción».
Aunque esto representa un avance hacia la garantía de los derechos reproductivos, la despenalización del aborto no será efectiva hasta que el Congreso ajuste las disposiciones penales correspondientes.
Las declaraciones que hicieron las y los diputados del Congreso del Estado en favor del derecho a decidir de las mujeres sobre su propio cuerpo dan entender que su intención es sacar adelante las reformas al Código Penal para que se materialice la despenalización.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ordenó al Congreso del Estado de Chiapas, hace unas semanas, adecuar su legislación para garantizar los derechos reproductivos de las mujeres, lo que incluye una revisión de las disposiciones que criminalizan el aborto.
La SCJN, en sus resoluciones, ha buscado garantizar que las legislaciones locales, incluido el marco normativo de Chiapas, se alineen con los estándares de derechos humanos establecidos en la Constitución y los tratados internacionales de los que México es parte.
EL ANTECEDENTE
El Congreso del Estado de Chiapas aprobó por mayoría la reforma al artículo 4 de la Constitución local el pasado 19 de noviembre. Aunque esta modificación no implica la despenalización del aborto, sí era un paso adelante hacía esa vía.
Esa reforma sustituya el texto que reconocía y tutelaba el derecho a la vida “desde el momento de la concepción”, que fue una iniciativa impulsada en diferentes estados de la república como respuesta a la despenalización del aborto en la Ciudad de México.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ordenó al Congreso del Estado de Chiapas, hace unas semanas, adecuar su legislación para garantizar los derechos reproductivos de las mujeres, lo que incluye una revisión de las disposiciones que criminalizan el aborto.
Esto surgió como parte de las acciones de inconstitucionalidad promovidas por organismos de derechos humanos y otros actores, en las que la Corte ha considerado que criminalizar el aborto de manera absoluta viola los derechos humanos de las mujeres y personas gestantes, ya que restringe su autonomía reproductiva y pone en riesgo su salud, seguridad y dignidad.
El debate sobre la despenalización del aborto en México está vinculado al reconocimiento de los derechos humanos y la igualdad de género. Despenalizar el aborto no solo busca garantizar la libre decisión de las mujeres, sino que también pretende proteger su salud. Esta reforma en Chiapas, aunque no despenaliza directamente el aborto, puede ser el primer paso hacia la creación de un marco normativo más equitativo y justo para todas las mujeres.
LA SUPREMA CORTE EN CASO CHIAPAS
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el pasado 8 de noviembre, despenalizó el aborto en Chiapas, esto luego de resolver una acción de inconstitucional que declaró como inválidos algunos artículos del Código Penal local que penalizaban la interrupción legal del embarazo.
Con nueve votos a favor y uno en contra, Chiapas está cerca de alcanzar la despenalización, pues sólo queda que las autoridades estatales homologuen su Código Penal.
Y es que, consultando el Código Penal de Chiapas, se encuentra que acceder a una interrupción legal del embarazo (ILE) en esta entidad es punible a excepción de sólo algunos escenarios: Cuando existiese peligro de muerte, alteraciones genéticas incompatibles con la vida.
Por ello, la resolución de la SCJN resulta importantísima, pues hace un llamado a que la penalización del aborto no sea sólo bajo ciertas condiciones, sino un derecho humano para todas sin necesidad de demostrar nada frente al Estado.
MUJERES EN CHIAPAS
De acuerdo con los últimos datos de la Secretaría de Gobierno, las mujeres en Chiapas representan el 51.2%, es decir, 5 millones 535 mil 828; el 20% de ellas se encuentran en edad reproductiva.Si bien no hay información que apunte al número de porcentajes anuales que se realizan en Chiapas a causa de la penalización, Ipas México aborda que en esta entidad se da el 5% de los nacimientos a nivel nacional.Y 2 de cada 10 nacimientos corresponden a mujeres menores de 20 años y anualmente, se suscitan 772 nacimientos en niñas y adolescentes de entre 9 y 14 años, lo que coloca a esta entidad como la número 6 con mayores nacimientos entre mujeres jóvenes, menores de edad y niñas, sólo detrás de Veracruz, Jalisco, Puebla, Estado de México y Guanajuato.
Asimismo, para 2014, Chiapas tenía el porcentaje de mujeres en edad fértil con una necesidad no cubierta en métodos anticonceptivos, 6 puntos porcentuales más que la media nacional, lo que expone una clara deficiencia en materia de salud sexual y acceso a métodos para evitar la concepción no deseada.
De acuerdo con Ipas, esto puede estar relacionado con una lejanía a los módulos informativos, la baja escolaridad y la pertenencia étnica que se liga a usos a costumbres. De hecho, de acuerdo con información de la Secretaría de Salud, el 59% de las mujeres que ingresaron al área de atención obstétrica (por parto o pérdida del producto), refirieron no tener ningún método anticonceptivo, asimismo, 2 de cada ellas, tenía menos de 20 años.