“Tiene que abrirse la frontera, porque también lo necesita Estados Unidos. No solo es una necesidad de los ganaderos mexicanos, sino que es una sociedad en la que se exporta, pero también hay quien lo importa y tiene la necesidad de que se abra la frontera por parte de Estados Unidos”, afirmó la mandataria.
Sheinbaum informó que la próxima semana arribará a México una misión del Departamento de Agricultura de Estados Unidos para evaluar las acciones implementadas contra el GBG. Entre las medidas acordadas se encuentra la construcción de una planta en Chiapas para la producción de moscas estériles, con una inversión de 21 millones de dólares por parte del gobierno estadounidense, destinada a erradicar la plaga.
La presidenta subrayó que no se han registrado nuevos casos de miasis en humanos provocados por el GBG y reiteró que las autoridades mexicanas han tomado todas las medidas necesarias para controlar la plaga. La reapertura de la frontera dependerá de la verificación y aprobación de las medidas por parte de la delegación estadounidense.