En conferencia de prensa, la secretaria ejecutiva del Sistema Nacional de Seguridad Pública del país latinoamericano, Marcela Figueroa, expuso que las entidades que conforman este bloque son:
1.Guanajuato — 2.562 casos.
2.Baja California — 1.982 asesinatos.
3.Estado de México — 1.919 casos.
4.Chihuahua — 1.660 asesinatos.
5.Jalisco — 1.514 casos.
6.Guerrero — 1.398 asesinatos.
7.Nuevo León — 1.365 casos.
En total, estas entidades, que se ubican principalmente en el centro y norte del territorio mexicano, conjuntan el 49,8% de los asesinatos ocurridos a nivel nacional. Asimismo, Figueroa señaló que, de 2019 a lo que va de 2024, el promedio diario de homicidios cometidos en el país latinoamericano disminuyó 13,4%.
Respecto a los delitos de alto impacto, la secretaria ejecutiva del Sistema Nacional de Seguridad Pública mexicano, explicó que también se reflejó una caída en su incidencia. Por ejemplo, el feminicidio bajó 14,9%, ello respecto a lo registrado en 2019.
Posteriormente, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de la nación latinoamericana, Omar García Harfuch, dio a conocer que, durante los primeros 28 días del Gobierno de Sheinbaum, se han detenido a 824 personas por crímenes de alto impacto, se incautaron 820 armas de fuego y se decomisaron 33,8 toneladas de droga, como cocaína y fentanilo.
El 8 de octubre de 2024, García Harfuch presentó la estrategia de seguridad que se desplegará en el territorio nacional en este sexenio.
Sin embargo, esta ha sido criticada por entidades como el Fondo Monetario Internacional (FMI), que insiste en que la resolución de los delitos a la brevedad ayudará al Producto Interno Bruto (PIB) mexicano. Ante ello, la mandataria mexicana respondió el 28 de octubre que la economía es estable y que su estrategia de seguridad dará resultados de manera paulatina.
En entrevista previa para Sputnik, el experto en Negociaciones de Política Exterior Rubén Ramos Muñoz consideró que los efectos de este plan se verán en un largo plazo, debido a la situación de seguridad que se vive en México.
“Son estrategias que están marcando una diferencia frente a los planes durante el Gobierno de [Andrés Manuel] López Obrador, como el fortalecimiento en inteligencia e investigación, que es piedra fundamental de cualquier Estado para atender los delitos de alto impacto, así como buscar el origen y contrarrestarlos (...) Sin embargo, son proyectos a muy largo plazo, cuyos resultados podrían verse mejor reflejados en 20 o 30 años. Es un proceso sumamente lento que, posiblemente, podría tener un ligero avance en los próximos dos o tres años”, concluyó.