Ciudad de México, 9 de feb de n2025.- La reciente inauguración de la exposición La Venida del Señor del artista mexicano Fabián Cháirez en la Academia de San Carlos de la UNAM ha desatado una fuerte controversia entre sectores conservadores y de la derecha mexicana. Dicha muestra, que aborda figuras del imaginario católico en contextos de erotismo y disidencia, ha generado reacciones encontradas en redes sociales y en el ámbito político.
En sintonía con el empresario Ricardo Salinas Pliego, Verástegui arremetió contra la UNAM por albergar la muestra artística. A través de un mensaje en X, Verástegui tachó la exhibición de “expresiones aberrantes” y acusó a la universidad de buscar generar controversia a costa de ofender la fe de millones de mexicanos.
“La UNAM, financiada con impuestos de ciudadanos católicos, está actuando de manera hipócrita”, sentenció el actor, cuestionando por qué la institución educativa no se atreve a desafiar otras “agendas progresistas, globalistas y aborteras”.
En contraste, el artista Fabián Cháirez ha defendido su obra, argumentando que busca abrir un diálogo sobre la disidencia sexual y los estereotipos de género en la sociedad mexicana. Con una trayectoria de más de 20 exposiciones en México, Estados Unidos y Europa, su obra se ha consolidado como un punto de referencia en el arte contemporáneo y la crítica social.
Otro de los grandes detractores ha sido Luis Felipe Calderón Zavala, hijo del expresidente Felipe Calderón, quien a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter) emitió una crítica que rápidamente se viralizó.
“Qué curioso que cuando se trata de mofarse de la religión, todos eligen a las de los creyentes más tolerantes: la católica y la cristiana. Claro, no se burlan de la musulmana, por ejemplo, porque amanecen hechos coladera”, escribió, dejando entrever una postura islamofóbica y violenta al sugerir que el arte crítico sería respondido con agresiones fatales por parte de la comunidad musulmana. El comentario del joven abogado de 26 años provocó una ola de reacciones en redes sociales, donde muchos usuarios lo acusaron de promover discursos de odio y estereotipos peligrosos contra la religión islámica.
A pesar de ello, Calderón Zavala no rectificó sus declaraciones y continuó atacando la exposición y a la UNAM, afirmando que “sólo buscan atención”.
En sintonía con su ideología conservadora como la de su padre y con la que se justificó una guerra contra el narcotráfico que sige afectando al país y cobrándose la vida de miles de mexicanos y mexicanas.
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