• La Verdad del Sureste |
  • Domingo 28 de Abril de 2024

La fallida refinería de Felipe Calderón


Ciudad de México.- La Refinería Bicentenario, propuesta por el expresidente Felipe Calderón en 2008 y cancelada por el expresidente Enrique Peña Nieto en 2014, se quedó en una barda perimetral, sin embargo dejó una deuda de miles de millones de pesos.
El tema de las refinerías está en boga, pues Xóchitl Gálvez, candidata presidencial del PRI, PAN y PRD aseguró que de llegar a la presidencia, cerraría algunas de las refinerías del país. Caso contrario a lo que ha realizado el actual gobierno, quien ha impulsado la remodelación y puesta en marcha de nuevas y viejas refinerías.
Esta idea también había sido prometida por Felipe Calderón quien anunció la construcción de la nueva Refinería Bicentenario. Cabe destacar que en aquella época, Xóchitl Gálvez, quien es originaria de Hidalgo, apoyaba la creación de la refinería de Calderón e instaba al gobierno estatal apoyar al federal en todo lo que necesitara.
Fue en marzo de 2008 cuando el ex presidente panista anunció que su gobierno construiría una planta capaz de procesar 250 mil barriles diarios de combustible, en un proyecto que significaba un desembolso total de 12 mil millones de dólares.
“Por primera vez en 30 años construiremos una nueva refinería con una inversión inicial de 12 mil millones de pesos el primer año. Con ello, se generarán miles de empleos, directos e indirectos, fortaleciendo la economía nacional”, indicó Calderón en 2014.
En abril de ese año, el entonces titular de Pemex, Jesús Reyes Heroles, dijo que Tula sería la sede de la refinería, mientras que Miguel Ángel Osorio Chong, entonces gobernador de Hidalgo, celebró la contratación de una deuda por mil 500 millones de pesos con Banamex, la cual se suponía que sería saldada en 12 años, pero no ocurrió así.
Los seis años posteriores, el Gobierno federal invirtió 3 mil 435 millones de pesos en contratos de licitación, aunque de acuerdo con la periodista Ana Lilia Pérez -autora de “Pemex RIP.
Vida y Asesinato de la Principal Empresa Mexicana”- dicha cantidad superó los 9 mil millones de pesos.
Después, en marzo de 2014, Enrique Peña Nieto anunció que se cancelaría el proyecto por no ser “rentable” y que en cambio se comenzaría un proceso de modernización de las refinerías existentes, cuyo costo total sería de 4 mil 600 millones de dólares.
El exalcalde de Tula y ex diputado local de Morena, Ricardo Baptista González, asegura que la refinería Bicentenario fue otro fraude de Calderón. Además trajo consigo el empeoramiento de la situación de los ejidatarios que vendieron sus tierras.
Se trata de la suma de varios factores: primero fue la resistencia de los ejidatarios y pequeños propietarios para vender sus parcelas, y luego, la frustración porque con el dinero de la venta, un millón de pesos por hectárea, muchos de los ejidatarios compraron maquinaria y equipo para participar en la construcción, cosa que jamás ocurrió.
Ahora, en parte de los terrenos para la frustrada refinería se tiene contemplada la construcción de un hospital del IMSS, según dio a conocer el Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien decidió hacer la obra energética en Dos Bocas, Tabasco, la cuál concluyó y puso en funcionamiento antes de finalizar su sexenio.
El experto en refinación petrolera, el ingeniero Herminio Morales González, asegura que la cancelación de la refinería en Tula, que potenciaría a la que ya existe, no sólo afectó a los tres municipios en los que se ubicaría, sino a todo el estado de Hidalgo y lo califica como un “símbolo de corrupción”.