Desde la segunda planta de este emblemático centro de abasto, la alcaldesa rememoró que, desde su apertura en 1962, ha sido testigo de innumerables historias y se ha consolidado como un valioso punto de encuentro para la oferta de productos locales y regionales que son puestos a disposición de la población.
Osuna Huerta valoró el testimonio de locatarias y locatarios que manifiestan toda una historia de vida, que son hijas, hijos o nietos de quienes fundaron el mercado y que, en los últimos años, han superado adversidades como inundaciones y pandemias.
Tras señalar que su gobierno seguirá en ese camino de mejorar los centros de abasto, la alcaldesa puntualizó ante los líderes de las uniones de diversos giros que próximamente se reabrirá la tortillería colectiva y las oficinas administrativas, además de seguir impulsando capacitaciones en materia de innovación y tecnología, para que este mercado “continúe siendo un símbolo de prosperidad, tradición, orgullo para todos nosotros”.