• La Verdad del Sureste |
  • Martes 23 de Abril de 2024

Legal el matrimonios de personas del mismo sexo


POR CECILIA VARGAS


Las parejas de personas del mismo sexo, en cualquier estado de la República, pueden contraer matrimonio civil y obtener el paquete completo de derechos que esto conlleva, mediante amparos y en base a sentencias que emitió el 5 de diciembre pasado la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Afi rmó lo anterior, el abogado Alex Alí Méndez Díaz, dedicado de llevar litigios en materia de matrimonio igualitario en el estado de Oaxaca y ponente en el evento para celebrar el Día Estatal contra la Discriminación y la Homofobia que tuvo lugar en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco.

 

El abogado expuso que, debido a que en Oaxaca aún no se reforman las leyes, por la falta de compromiso de los partidos políticos con los derechos humanos, el Registro Civil se había negado a permitir matrimonios de parejas del mismo sexo, por lo que decidieron utilizar la vía judicial El artículo 143 del Código Civil de Oaxaca establece que el matrimonio es un contrato entre un hombre y una mujer y en base a eso, se negó atender una solicitud, por lo que recurrimos al amparo ante los tribunales federales, tomando en cuenta que esa acción es violatoria al principio de igualdad y no discriminación.

 

El litigio tardó en resolverse alrededor de año y medio y en diciembre del año pasado la SCJN, dictaminó que negar esa solicitud de matrimonio era violatorio al principio de igualdad y no discriminación. De esa manera el Registro Civil de Oaxaca fue obligado a celebrar los matrimonios igualitarios y el pasado 22 de marzo se celebró el primero entre una pareja de mujeres, la primera en Oaxaca, afi rmó. A partir de esa experiencia, narró, otras parejas de más estados han recurrido al amparo -Colima, Sinaloa, Yucatán- y estamos trabajando también en Chihuahua, Baja California, Nuevo León y Morelos.

 

“La trascendencia de esto es que ya no necesitamos entrar a negociaciones con los partidos políticos, que es lo que nos ha mantenido rezagados en el tema, el tener que negociar, llegar a acuerdos con los partidos políticos; a través de esta vía ya no les tenemos que preguntar si quieren o no otorgarnos esos derechos, simplemente tiene que acatar, quieran o no”. Quisimos impulsar esto para demostrar que hay otras formas de hacer activismo, dijo el abogado, analizamos y llegamos a la conclusión de que, por más que hubiéramos salido a las calles de Oaxaca para exigir una reforma, el Congreso no lo haría. Tan es así que luego de las primeras sentencias logradas, donde ya se concedía ese derecho, fueron el Congreso, el Gobernador y Registro Civil quienes se opusieron a que esas sentencias se cumplieran, por eso fue que tuvimos que acudir a la SCJN. Este mismo escenario, abundó, lo estamos enfrentando en Colima, es decir, la oposición del Congreso y el gobernador, afortunadamente hemos demostrado que aun en contra de su voluntad podemos lograr esos cambios.

 

Cuestionado en relación al caso Tabasco, Alex Alí Méndez, dejó entrever que sería más sencillo, ya que el Código Civil local, a diferencia del de Oaxaca y otras entidades, no tiene defi nición en cuanto a que el matrimonio es un contrato entre hombre y mujer. Eso signifi caría que no hay una fundamentación legal para negar el matrimonio entre personas del mismo sexo; ese tipo de lagunas han sido aprovechadas en Quintana Roo, mencionó. Ese tipo de acciones, planteó, podrían acelerar las reformas a los códigos civiles en esa materia, son un impulso que no vimos cuando se aprobó el matrimonio igualitario en el DF, cuando se pensó que se extendería a los estados.

 

Es más factible recurrir a la vía legal que lograr la construcción de acuerdos en los congresos, para no solo contraer matrimonio, sino todo el paquete de derechos que esto conlleva, incluyendo la adopción por parejas del mismo sexo. Respecto a las entidades que cuentan con reformas que permiten los matrimonios igualitarios, el abogado informó que solo el Distrito Federal; en Coahuila solo existe un Pacto Civil de Solidaridad, pero es similar a la Ley de Sociedades de Convivencia que hay en el DF y no otorga todos los derechos de un contrato matrimonial. Por último opinó que antes no se había recurrido a esos mecanismos jurídicos, más que por desconocimiento de nuestras leyes y derechos, por desconfi anza hacia nuestro sistema jurídico. Agregó que por esa vía, también podrían abordarse casos como la interrupción legal del embarazo