• La Verdad del Sureste |
  • Jueves 25 de Septiembre de 2025

Los de abajo

Fernández Noroña: De crítico feroz a defensor a ultranza de Adán Augusto

Publicado el:

Alejandro Hernández


Poderoso caballero es don dinero, dice un adagio popular. Esto viene a cuento porque el flamante presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Gerardo Fernández Noroña, pasó a ser un contumaz crítico de Adán Augusto López Hernández, durante la precampaña presidencial de Morena en su más feroz defensor de lo que él llama “guerra sucia” contra su líder senatorial por su relación con el delincuente que designó como secretario de Seguridad y Protección Ciudadana en 2019.
 

Si antes concitaba simpatías por su actitud crítica e irreverente, ahora genera repulsa por defender lo indefendible, como si poner a un mafioso como responsable de la seguridad del estado haya sido un asunto menor.
 

Si alguien sabe para qué sirve el dinero, ese es precisamente el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, si no vean cómo logró domesticar a Fernández Noroña.
 

A eso vino a Tabasco el fin de semana, a dar la cara por Adán Augusto, porque él no ha tenido el valor de venir a enfrentar a los tabasqueños y explicarles por qué nombró como secretario de Seguridad a un delincuente y su gavilla.
 

Durante su visita, Fernández Noroña cuestionó: "¿De qué se le acusa exactamente? ¿Cuál es el número de la investigación previa? ¿En qué momento fue llamado a declarar? ¿Cuándo solicitaron su desafuero el Ministerio Público o un juez?".
 

El legislador señaló que ciertos sectores de la derecha y algunos medios intentan señalarlo como culpable, “manchando su reputación” y pidiendo su retiro de la vida pública, sin que exista un proceso legal formal en su contra.
 

Noroña afirmó que Roberto Madrazo Pintado y Manuel Andrade Díaz carecen de autoridad moral para criticarlo, dado el historial de sus gestiones gubernamentales deficientes.
 

Además, aclaró que las acusaciones se dirigen contra Hernán Bermúdez, quien está prófugo, y no contra López Hernández.
 

Así no pensaba el flamante presidente de la mesa directiva hace dos años, cuando él era uno de los cinco candidatos hombres que le disputó la candidatura presidencial a la hoy presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
 

No se olvida que, durante la precampaña presidencial de Morena en 2023, Fernández Noroña acusó a Adán Augusto de haber orquestado un supuesto boicot en su contra.
 

Específicamente, Noroña afirmó que Adán Augusto, entonces precandidato a la presidencia por Morena, había enviado "golpeadores" para sabotear sus eventos de campaña y obstaculizar su participación en el proceso interno del partido.
 

No solo eso, sino que cuestionaba el dispendio que se observaba en la campaña de López Hernández, quien tapizó todo el país con espectaculares, y cuyo origen del dinero siempre generó por lo menos sospechas, sobre todo porque rechazó los 5 millones de pesos que la dirigencia nacional ofreció a los precandidatos para hacer campaña.
 

No los quiso porque así no tendría que rendir cuentas y se sabría que gastó más que ese monto establecido como tope de gasto e campaña.
 

Las acusaciones de Noroña surgieron en ese contexto de tensiones internas dentro de Morena. El hoy senador expresó su frustración por no haber sido considerado para cargos relevantes, como un puesto en el gabinete o una coordinación legislativa, a pesar de haber obtenido el tercer lugar en la encuesta interna del partido para definir al candidato presidencial.
 

Según Fernández Noroña, estas maniobras de Adán Augusto formaban parte de un esfuerzo para marginarlo dentro del proceso de selección.
 

Noroña, conocido por su estilo combativo, no dudó en señalar públicamente a Adán Augusto como uno de los responsables de lo que él percibía como un trato injusto. Pero ese “trato injusto” dejó de serlo cuando por intermediación de López Hernández se convirtió en presidente de la Mesa Directiva del Senado.
 

A partir de ese posición hubo un cambio radical en su postura. Fernández Noroña ha adoptado una postura radicalmente distinta, convirtiéndose en un defensor a ultranza de Adán Augusto, quien enfrenta señalamientos por presuntos vínculos con el crimen organizado, particularmente relacionados con el caso de Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad, acusado de liderar el grupo criminal "La Barredora".
 

Noroña ha enfatizado que los ataques contra Adán Augusto son, en realidad, un "golpeteo político" dirigido no solo contra el senador, sino contra el movimiento de la Cuarta Transformación en su conjunto.
 

Como presidente de la Mesa Directiva del Senado, Noroña ha defendido la presunción de inocencia de Adán Augusto, argumentando que no existe ninguna carpeta de investigación formal ni pruebas concretas en su contra. Esta defensa se enmarca en su compromiso con proteger la unidad y la imagen de Morena frente a lo que percibe como una campaña mediática y política orquestada por la oposición y ciertos medios de comunicación.
 

SE DEJÓ AGARRAR LA PIERNA
 

¿Quién maneja el presupuesto del Senado? Pues Adán Augusto y sabe como usar el dinero para conseguir sus fines. Borró las diferencias que había entre él y exgobernador. Hoy es su principal defensor con el argumento de que lo hace más que nada por defender la “unidad” del movimiento.
 

Hoy le ve cualidades y lo califica de "gran operador político" y que no hay motivos legales para que deje su cargo como coordinador de la bancada de Morena en el Senado. A pesar de que la prensa nacional ha documentado que su versión de que no sospechaba de Hernán Bermúdez es insostenible.
 

Hace unas semanas Fernández Noroña viajó a París en clase ejecutiva para asistir a la Conferencia Europea de Presidentes de Parlamentos que se realizó en Estrasburgo y ese viaje generó controversia debido a la percepción de incoherencia con los principios de austeridad que promueve Morena y la Cuarta Transformación, viajes que han sido criticados por la presidenta en más de una ocasión.
 

El boleto en clase ejecutiva de Air France tuvo un costo de aproximadamente 102 mil 686 pesos, de los cuales el Senado cubrió 36 mil 480 pesos, mientras que Noroña reembolsó 66 mil 206 pesos para cubrir la diferencia, según se dijo.
 

Además, el viaje incluyó viáticos y un tren en primera clase de París a Estrasburgo, sumando un total de 157 mil 594 pesos.
 

La duda pública surge porque, aunque Noroña afirmó haber pagado la diferencia de su bolsillo y que el Senado solo cubrió el equivalente a clase turista, las facturas muestran que el boleto fue inicialmente facturado al Senado, lo que generó críticas por el uso de recursos públicos para un viaje en una categoría de lujo, en clase premier. ¿Quién pompó boletito, quién pompó?