“El narcotráfico tiene que ver con la demanda, hay consumo de una droga y hay quien aporta esa droga”, explicó la mandataria en una conferencia de prensa en la que fue cuestionada por las críticas de funcionarios de EE.UU. contra las políticas de seguridad de México.
“Nosotros, más allá de que no estamos de acuerdo con el narcotráfico, evidentemente, nuestro objetivo es disminuir la violencia en nuestro país, y en ese proceso también disminuir la producción de una droga y su distribución”, agregó.
Los objetivos del gabinete de Seguridad, agregó, se basan en frenar a los generadores de violencia y la producción de sustancias, pero insistió en que el papel de EE.UU. es central en ese mercado ilegal.
“Por eso decimos que EE.UU. tiene que hacer su parte (…) para atender el asunto de salud pública y la distribución de las drogas en su territorio”, dijo.
López Obrador
También defendió la estrategia que ha puesto en marcha durante su Gobierno y respaldó la gestión de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, quien sigue siendo criticado por haber impuesto el lema “abrazos, no balazos”, como una manera de dar por terminada la guerra contra el narcotráfico con el fin de iniciar la pacificación.
“Siempre vamos a defender al presidente López Obrador porque fue un gran presidente. Que no se equivoque nadie, somos parte del mismo movimiento, ahí esta la oposición queriendo que nos distanciemos, eso no va a pasar”, advirtió.
Recordó, además, que el expresidente tenía una sección en sus conferencias de prensa llamada “cero impunidad”, que demostraba una lucha frontal contra las organizaciones criminales.
“Hay esta idea de que ‘abrazos no balazos’ era darle carta abierta a la delincuencia, eso es absolutamente falso, eso lo dijeron algunos medios y ‘comentócratas’. La secretaría de Seguridad decía: ‘abrazos no balazos’, no quiere decir que estemos cruzados de brazos”, señaló.