El Senado de la República aprobó por unanimidad una reforma impulsada por la presidencia de Claudia Sheinbaum, que declara al sistema ferroviario como área prioritaria para el desarrollo nacional. Con 123 votos a favor, se modifica el artículo 28 constitucional para favorecer la reactivación de trenes de pasajeros y fortalecer el control estatal de las vías.
Entre los cambios destacados, la reforma permite que empresas con concesiones de carga operen también trenes de pasajeros, priorizando estos últimos, e introduce el uso de energías limpias en el sistema ferroviario. Además, se crea la Agencia de Trenes y Transporte Público Integrado, un nuevo organismo regulador especializado.
Aunque la oposición respaldó la iniciativa, advirtió sobre la necesidad de mayor planeación, sostenibilidad financiera y transparencia en los futuros proyectos, para evitar sobrecostos e irregularidades.
El dictamen establece un plazo de 180 días para actualizar las leyes secundarias. Asimismo, impulsa proyectos emblemáticos como los trenes México-Pachuca, México-Querétaro, Saltillo-Nuevo Laredo e Irapuato-Querétaro, con una expansión prevista de más de 3?000?km de nuevas vías entre 2025 y 2029.
Con el respaldo legal, el Estado retoma un rol central en la gestión ferroviaria, con el objetivo de mejorar la movilidad, reducir la congestión carretera y fomentar un transporte más sostenible.
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