La directora del Instituto para el Fomento de las Artesanías de Tabasco (IFAT), Vianey Rodríguez Torres, informó sobre la implementación de sellos de autenticidad y procesos de certificación para proteger la "Tira bordada en punto de lomillo", pieza reconocida como Patrimonio Cultural del Estado de Tabasco.
En rueda de prensa realizada en la Casa de las Artesanías, en la zona CICOM, Rodríguez Torres explicó que estas acciones buscan salvaguardar la autenticidad de la pieza artesanal ante la creciente comercialización de versiones industrializadas, realizadas con máquinas de sublimado que simulan los diseños originales.
Destacó que el Gobierno estatal ha definido estrategias a corto, mediano y largo plazo para respaldar al sector artesanal. Entre ellas, la firma de convenios con el Centro de Capacitación para el Trabajo Industrial (CECATI) y el Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER), orientados a certificar los procesos de producción artesanal.
Rodríguez también dio a conocer la consolidación del Padrón Artesanal, que integra a mil 344 artesanas y artesanos de los 17 municipios del estado. Todos ellos han aprobado la evaluación de la Matriz de Diferenciación entre Artesanía y Manualidad (DAM), lo que les permite acceder a ferias, corredores artesanales, programas de capacitación, certificación como maestras o maestros artesanos y oportunidades de exportación.
Subrayó que la comercialización de tiras bordadas por sublimado podría considerarse un plagio, ya que afecta la identidad cultural y pone en riesgo el valor simbólico de esta tradición. Por ello, junto con diputadas y diputados locales, realizarán visitas a comercios para promover la conciencia sobre la importancia de retirar productos que imitan la tira bordada auténtica.
Durante el evento, Rodríguez Torres, acompañada por artesanas locales, invitó a la ciudadanía a convertirse en embajadora de esta tradición cultural, recordando que cada pieza auténtica requiere entre uno y tres meses de trabajo manual, lo que le otorga un valor artístico y simbólico único.
La directora del IFAT alertó que la producción industrializada no solo amenaza el valor cultural de la tira bordada, sino que también impacta negativamente en las familias artesanas que dependen de su venta. En ese sentido, recordó que en abril de 2024, el Congreso del Estado reconoció oficialmente esta pieza como Patrimonio Cultural de Tabasco, y que desde octubre de 2023 está vigente la Ley de Fomento y Protección Artesanal.
Por su parte, la diputada María Félix García Álvarez, presidenta de la Comisión de Cultura del Congreso local, indicó que se trabajará en la concientización social como primer paso para detener esta competencia desleal.
A su vez, Karla Alejandra Garrido Perera, subsecretaria de Fomento a la Lectura y Publicaciones de la Secretaría de Cultura, advirtió que la industrialización de esta artesanía reduce la demanda de las piezas auténticas, pues los productos fabricados en serie se venden hasta un 50% más baratos, afectando los ingresos de las familias artesanas.