“Hemos recibido a niñas con sus progenitoras para abordar distintos tipos de violencia, incluida la sexual”, afirmó Magaña al detallar que uno de los casos, registrado ocurrió en un municipio del que no dio más detalle, y requirió la intervención urgente de autoridades, que derivó en la detención del señalado en menos de siete días.
Acciones y Limitaciones Institucionales
La funcionaria destacó que el IEM ofrece acompañamiento y contención emocional a las víctimas, pero aclaró que no realiza valoraciones psicológicas ni procesos legales directos: “Nuestra labor es guiar y canalizar los casos. Si una madre llega con su hijo, por supuesto, le brindamos atención inicial”. Sin embargo, reconoció obstáculos sistémicos, como un caso paralizado en la Fiscalía General del Estado debido a la falta de especialistas en atención a menores.
Ante este vacío, Magaña Lugo subrayó que el Centro de Atención a Menores, Víctimas e Incapaces (CAMVI) es la instancia responsable de dar seguimiento a casos que involucran a niños. Esta declaración surge en paralelo a la denuncia pública de una madre que exige justicia por el presunto maltrato escolar que su hijo de 8 años habría sufrido por parte de una docente durante más de un año, sin respuestas concretas de las autoridades educativas.
Llamado a Fortalecer Redes de Apoyo
La directora del IEM enfatizó la importancia de que las víctimas y sus familias acudan a las instituciones correspondientes para activar protocolos. “La colaboración interinstitucional es clave”, insistió, aunque admitió que la falta de recursos especializados en algunas áreas limita la resolución expedita de ciertos casos.
Magaña hizo un llamado a la sociedad y a las autoridades a priorizar la protección de menores y a agilizar los procesos legales y de atención psicológica, especialmente en contextos donde la violencia sexual o escolar persiste. “La justicia no puede esperar cuando se trata de la integridad de nuestras niñas y niños”, concluyó.