La primera impresión que se logra en una entrevista de trabajo, no es el único factor de relevancia. Para ganar puntos extras en estos encuentros, se debe responder de manera inteligente a cada una de las preguntas que plantea el reclutador.
El portal de internet Generaccion.com, así como la web Meborre.com publicaron una serie de cuestionamientos y consejos para superar con éxito esta etapa, logrando convencer al personal de recursos humanos. Conoce las interrogantes y respuestas ideales, que te pueden llevar a ingresar al empleo que tanto has buscado.
Uno de los errores que más se cometen en las entrevistas de trabajo, es el de responder sin reflexionar a los cuestionamientos. Por ejemplo, el reclutador plantea lo siguiente: “¿Cuál es tu mayor defecto?”, la respuesta más habitual es: “Ser perfeccionista”. Esto, normalmente terminaría siendo un rechazo y no un acierto como se puede esperar.
De acuerdo con Universidades.com, el convertir una cualidad en desperfecto no es una acción inteligente. Se recomienda hacer uso de la sinceridad, como el aceptar lo complicado que te puede ser tomar decisiones. El efecto será positivo, pues dejará ver el lado analítico de tu personalidad.
Otra de las preguntas que comúnmente se suelen realizar son: “Según tus amigos, ¿cuál es tu mayor defecto?”. El entrevistado debe procurar no agrandar su respuesta evitando los “muy” o “demasiado”. Al igual que la primera, la honestidad es pieza clave.
“Si tuvieras que despedir a alguien, ¿cómo se lo dirías?”. Ni muy autoritario, ni muy desentendido. La respuesta ideal sería: “Lo citaría en un despacho y le diría mirándole a los ojos que no puede seguir con la empresa. Trataría de convencerlo sobre el cambio e, incluso, lo invitaría a colocarlo en otro empleo más adecuado”. Mirarlo de frente, ayudaría a expresar nobleza.
Uno de los cuestionamientos habituales, para medir la ambición, es: “¿Qué es más importante: el trabajo o el dinero?”. Para contestar, lo mejor es lo siguiente: “Prefiero ganar menos, pero trabajando a gusto”.
La actitud es un valor muy importante para un futuro candidato, por lo que cuando se te presenta la pregunta: “Si te ordenaran hacer un trabajo que no te gusta, ¿qué harías?”. Se recomienda analizar la situación, respondiendo: “Realizarlo. Lo he hecho muchas veces”. “¿En qué ocasiones mentirías?”. Toma en cuenta que si en el desarrollo de la entrevista te has manejado de manera honesta, esta no es la excepción. Como sugerencia, no titubees en decir: “Para no herir a un compañero. Pero prefiero decirle la verdad si veo que así puedo corregir un grave error”.
El portal de internet Generaccion.com, así como la web Meborre.com publicaron una serie de cuestionamientos y consejos para superar con éxito esta etapa, logrando convencer al personal de recursos humanos. Conoce las interrogantes y respuestas ideales, que te pueden llevar a ingresar al empleo que tanto has buscado.
Uno de los errores que más se cometen en las entrevistas de trabajo, es el de responder sin reflexionar a los cuestionamientos. Por ejemplo, el reclutador plantea lo siguiente: “¿Cuál es tu mayor defecto?”, la respuesta más habitual es: “Ser perfeccionista”. Esto, normalmente terminaría siendo un rechazo y no un acierto como se puede esperar.
De acuerdo con Universidades.com, el convertir una cualidad en desperfecto no es una acción inteligente. Se recomienda hacer uso de la sinceridad, como el aceptar lo complicado que te puede ser tomar decisiones. El efecto será positivo, pues dejará ver el lado analítico de tu personalidad.
Otra de las preguntas que comúnmente se suelen realizar son: “Según tus amigos, ¿cuál es tu mayor defecto?”. El entrevistado debe procurar no agrandar su respuesta evitando los “muy” o “demasiado”. Al igual que la primera, la honestidad es pieza clave.
“Si tuvieras que despedir a alguien, ¿cómo se lo dirías?”. Ni muy autoritario, ni muy desentendido. La respuesta ideal sería: “Lo citaría en un despacho y le diría mirándole a los ojos que no puede seguir con la empresa. Trataría de convencerlo sobre el cambio e, incluso, lo invitaría a colocarlo en otro empleo más adecuado”. Mirarlo de frente, ayudaría a expresar nobleza.
Uno de los cuestionamientos habituales, para medir la ambición, es: “¿Qué es más importante: el trabajo o el dinero?”. Para contestar, lo mejor es lo siguiente: “Prefiero ganar menos, pero trabajando a gusto”.
La actitud es un valor muy importante para un futuro candidato, por lo que cuando se te presenta la pregunta: “Si te ordenaran hacer un trabajo que no te gusta, ¿qué harías?”. Se recomienda analizar la situación, respondiendo: “Realizarlo. Lo he hecho muchas veces”. “¿En qué ocasiones mentirías?”. Toma en cuenta que si en el desarrollo de la entrevista te has manejado de manera honesta, esta no es la excepción. Como sugerencia, no titubees en decir: “Para no herir a un compañero. Pero prefiero decirle la verdad si veo que así puedo corregir un grave error”.
