No hubo cohetones, pero los yokot'anes de Tucta, Guatacalca, Guaytalpa, Taxco, San Isidro y Corriente, coincidieron que el solo hecho de recorrer el predio que albergará la subestación eléctrica, es una fiesta que acabará con los apagones, los daños a los aparatos eléctricos y el malestar.
Don Asunción Rodríguez fue uno de los que escuchó las palabras del presidente municipal de Nacajuca, Roberto Ocaña Leyva, pronunciadas en el terreno de dos hectáreas donde la Comisión Federal de Electricidad (CFE) edificará la infraestructura, que vendrá a reforzar el servicio de energía para los 9 mil 394 habitantes de la región indígena chontal.
"Es una fiesta, pero les pedí que no tiraran cohetes. La verdad, me siento muy motivado", dijo el edil, quien agilizó los trámites de la donación de lo que fue un tupido camalote y en donde quedaron como límites árboles de piché, sauces y tintos; en el perímetro interior se realizarán los trabajos de obra civil, a partir del próximo año, y después la construcción del transformador base.
De la emoción de este histórico día también entendió el viejo Asunción: Se crió al puro candil, que para ese momento era mejor que la noche, y a los 13 años, su familia dejó de comprar la lata con petróleo, que ya costaba diez pesos en la tienda de don Antonio Vázquez, en pleno centro de Nacajuca, porque llegó la luz eléctrica a las mesas de su natal Tapotzingo.
Este sábado le tocó ser testigo de otro capítulo memorable para su pueblo: La visita de reconocimiento al descampado del kilómetro 1, que efectuó el Gobernador Javier May Rodríguez, acompañado del superintendente de Distribución Villahermosa, de la CFE, Ramón Gilberto Guzmán; y la secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible (Semades), Sheila Cadena Nieto.
"Nos hicimos muchos y ya no da abasto la luz, ya hay casas con climas, por eso se va la luz a cada rato y se queman los refrigeradores. Con la subestación se va acabar ese problema. Han pasado gobiernos y no hicieron nada, que bueno que éste, en poco tiempo, ya da soluciones", contó esperanzado.
El delegado de Guaytalpa, Amado Arias, oyó decir al Gobernador que se atiende "como prioridad" el mantenimiento de la red eléctrica, trabajos que hasta ahora han alcanzado 700 kilómetros de cables, conectores y transformadores, así como la construcción de más y mejor infraestructura, como la que se prevé levantar en este terreno.
"En el estiaje, cuando la temperatura está muy alta, son clásicos los apagones, los bajones de corriente se multiplican y los transformadores presentan desperfectos porque ya están vencidos por viejos. Es un acierto del Gobernador y el presidente municipal que le hayan echado ganas a este asunto urgente. Debió de hacerse hace tiempo, pero nunca lo hicieron", reconoció la autoridad de la comunidad yokot'an.
El grito de "sí se pudo, sí se pudo", acompañó al mandatario estatal cuando explicó que los gobiernos neoliberales intentaron vender la CFE, pero que no se logró gracias a la llegada del Presidente Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia.
Entre las porristas que aplaudieron a May Rodríguez, cuando éste informó que su Gobierno paga 434 millones de pesos para subsidiar la tarifa eléctrica, se encontraba un grupo de mujeres que vino de la zona conurbada de Brisas del Carrizal, Saloya y Vivero, portando una pancarta que decía: "También es dar las gracias".
"Aquí está la realidad y es un gusto para nosotras, estamos muy orgullosas que el Gobernador venga al municipio a ver las necesidades que estamos pasando. Gracias por su apoyo y el del arquitecto Ocaña. Primero Dios, nos va ir bien a todos. Y no es solo pedir, estamos hoy para dar las gracias. No cabe duda que nuestro voto fue positivo", declaró doña Flor de María Ventura.
Los tamborileros Kay tu ba buk'ji o Músicos del Pantano despidieron con "El hombre del sureste" al mandatario, confiados en que pronto la luz ya no se irá más