Padilla Herrera cuestionó que el gobernador salga a repetir una y otra vez que no permitirá que Peñitas aumente su desfogue a 2 mil 500 metros cúbicos por segundo, cuando eso no depende de él sino de los análisis matemáticos que hacen instituciones especializadas en la materia
VILLAHERMOSA, TABASCO. 16 DE SEPTIEMBRE DE 2010. Cada vez que el gobernador Andrés Granier Melo habla sobre temas hidráulicos o de manejo de presas, no sabe lo que dice, y ya es tiempo que alguien le tape la boca, afirmó el ex director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Armando Padilla Herrera.
Y pese a que tiene “todo el dinero del mundo” para contratar buenos asesores en materia hidráulica, “al gobernador le ha gustado rodearse de lo peor”, salvo “algunas” excepciones.
A Granier le satisface estar con gente “que lo alabe, que lo adule, aunque esté feo como un demonio, le gusta que digan que está bien lo que él decide”, agregó.
Con esto, añadió, Tabasco sólo puede seguir esperando “peores” cosas para los próximos años.
Padilla Herrera cuestionó que el gobernador salga a repetir una y otra vez que no permitirá que Peñitas aumente su desfogue a 2 mil 500 metros cúbicos por segundo, cuando eso no depende de él sino de los análisis matemáticos que hacen instituciones especializadas en la materia, y en los cuales Conagua y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se basan para tomar sus decisiones.
Como aclaración, hasta ayer por la tarde la turbinación de esa presa estaba en 2 mil 100 metros cúbicos por segundo.
“En el caso de la presa de Malpaso y de la presa de Peñitas hay veinte modelos matemáticos, veinte hipótesis científicas, veinte teorías que tienen un fundamento en la ciencia no en la emoción del ser humano, y la Conagua hace un promedio de ellas que vienen de doctores de la UNAM, IPN, de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). de la Universidad de Guadalajara (U de G), del Instituto Tecnológico del Agua” para decidir la cantidad de metros cúbicos por segundo que se deben desfogar, explicó.
Por tanto, clarificó, “si los modelos matemáticos señalan que hay que turbinar 2 mil 500 metros cúbicos por segundo hoy, hay que turbinarlos aunque el gobernador diga misa”.
Manifestó que muchas veces “los cimarrones de aquí”, como califica a los funcionario estatales que asisten a las reuniones del comité técnico donde se define el manejo de presas, llegan a plantear cosas sin tener conocimiento de causa.
“Yo te garantizo que si yo estuviera ahí” en el comité técnico, “le callo la boca” a Granier, que no tiene sentido que ande diciendo que no permitirá que el desfogue de Peñitas llegue a 2 mil 500 metros cúbicos por segundo, expuso.
“Le hubiera dicho lo que le dije a Humberto (Mayans) en una reunión siendo director local de la Conagua. Humberto Mayans Canabal me presume en una reunión de que teníamos que cerrar la compuerta de El Macayo en la parte que tiene que ver con la cortina y le dije que no eran enchiladas lo que estaba planteando, que cada costal pesa siete toneladas y que esos costalitos no se llenan afuera, se llenan adentro del agua, por buzos especialistas, y que yo no podía complacer una petición tan absurda”.
“De esta platica fueron testigos Felipe Arregin, Antonio Dávila Capiterucho y un servidor, y por parte del científico de Humberto Mayans, estaban Silvia Whizar y Lorena Beaurregard, esos eran sus especialistas”, ironizó.
“Y la replica de Humberto fue; es que ya se te olvidó que fui secretario de Obras Públicas”. Respondí; “Por su puesto que no se me ha olvidado, tan no se me ha olvidado que tu tienes salinizado a medio estado, porque la Boca de Panteones que tu irresponsablemente abriste tiene en la ruina a toda esa zona. No tan sólo fuiste un mal secretario de SAOP (Con Enrique González Pedrero), fuiste un mal constructor de carreteras porque hasta la carretera que hiciste en la costera, ya se la llevó el mar”.
“Como crees que se puso Humberto en la reunión, furioso, y como crees que estaba yo, feliz y tranquilo, porque ya se acabaron los tiempos en que el secretario de Gobierno manejaba a los delegados federales”, narró el panista.
“Si ese es el bagaje que acompaña al gobernador Granier para resolver sus problemas hidráulicos; la opinión política de Humberto y sus especialistas, o la opinión política del químico y sus especialistas en química sanguínea, el estado tiene que seguir esperando peores cosas para 2011 y el 2012; un desastre”, puntualizó.
Y pese a que tiene “todo el dinero del mundo” para contratar buenos asesores en materia hidráulica, “al gobernador le ha gustado rodearse de lo peor”, salvo “algunas” excepciones.
A Granier le satisface estar con gente “que lo alabe, que lo adule, aunque esté feo como un demonio, le gusta que digan que está bien lo que él decide”, agregó.
Con esto, añadió, Tabasco sólo puede seguir esperando “peores” cosas para los próximos años.
Padilla Herrera cuestionó que el gobernador salga a repetir una y otra vez que no permitirá que Peñitas aumente su desfogue a 2 mil 500 metros cúbicos por segundo, cuando eso no depende de él sino de los análisis matemáticos que hacen instituciones especializadas en la materia, y en los cuales Conagua y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se basan para tomar sus decisiones.
Como aclaración, hasta ayer por la tarde la turbinación de esa presa estaba en 2 mil 100 metros cúbicos por segundo.
“En el caso de la presa de Malpaso y de la presa de Peñitas hay veinte modelos matemáticos, veinte hipótesis científicas, veinte teorías que tienen un fundamento en la ciencia no en la emoción del ser humano, y la Conagua hace un promedio de ellas que vienen de doctores de la UNAM, IPN, de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). de la Universidad de Guadalajara (U de G), del Instituto Tecnológico del Agua” para decidir la cantidad de metros cúbicos por segundo que se deben desfogar, explicó.
Por tanto, clarificó, “si los modelos matemáticos señalan que hay que turbinar 2 mil 500 metros cúbicos por segundo hoy, hay que turbinarlos aunque el gobernador diga misa”.
Manifestó que muchas veces “los cimarrones de aquí”, como califica a los funcionario estatales que asisten a las reuniones del comité técnico donde se define el manejo de presas, llegan a plantear cosas sin tener conocimiento de causa.
“Yo te garantizo que si yo estuviera ahí” en el comité técnico, “le callo la boca” a Granier, que no tiene sentido que ande diciendo que no permitirá que el desfogue de Peñitas llegue a 2 mil 500 metros cúbicos por segundo, expuso.
“Le hubiera dicho lo que le dije a Humberto (Mayans) en una reunión siendo director local de la Conagua. Humberto Mayans Canabal me presume en una reunión de que teníamos que cerrar la compuerta de El Macayo en la parte que tiene que ver con la cortina y le dije que no eran enchiladas lo que estaba planteando, que cada costal pesa siete toneladas y que esos costalitos no se llenan afuera, se llenan adentro del agua, por buzos especialistas, y que yo no podía complacer una petición tan absurda”.
“De esta platica fueron testigos Felipe Arregin, Antonio Dávila Capiterucho y un servidor, y por parte del científico de Humberto Mayans, estaban Silvia Whizar y Lorena Beaurregard, esos eran sus especialistas”, ironizó.
“Y la replica de Humberto fue; es que ya se te olvidó que fui secretario de Obras Públicas”. Respondí; “Por su puesto que no se me ha olvidado, tan no se me ha olvidado que tu tienes salinizado a medio estado, porque la Boca de Panteones que tu irresponsablemente abriste tiene en la ruina a toda esa zona. No tan sólo fuiste un mal secretario de SAOP (Con Enrique González Pedrero), fuiste un mal constructor de carreteras porque hasta la carretera que hiciste en la costera, ya se la llevó el mar”.
“Como crees que se puso Humberto en la reunión, furioso, y como crees que estaba yo, feliz y tranquilo, porque ya se acabaron los tiempos en que el secretario de Gobierno manejaba a los delegados federales”, narró el panista.
“Si ese es el bagaje que acompaña al gobernador Granier para resolver sus problemas hidráulicos; la opinión política de Humberto y sus especialistas, o la opinión política del químico y sus especialistas en química sanguínea, el estado tiene que seguir esperando peores cosas para 2011 y el 2012; un desastre”, puntualizó.
