Demandan la integración de una comisión que ponga orden al servicio de la lancha propiedad de la comunidad, porque por el momento solo beneficia a unos cuantos. (Foto: Cecilia Vargas).
Despensas distribuidas por elementos de la Marina, agua potable, brigadas médicas, lanchas y pastura para el ganado demandan, para sus comunidades, representantes de las cinco secciones del Tintillo, los aztlanes, de Cruz del Bajío, Zapote y González del municipio del Centro.
Entrevistados durante una reunión en las oficinas del Movimiento Ecologista de Tabasco, Filiberto Paz Cordero de Aztlan segunda sección, pide al presidente municipal del Centro, Jesús Alí que haga llegar a esa comunidad las despensas semanales que prometió.
A lo mejor si las está enviando, dijo, pero no llegan a todos los habitantes, por lo que solicitó que las hagan llegar a través de los elementos de la Marina, “porque no sabemos dónde quedan”, comentó.
El delegado municipal, solo pide para su comunidad el sector Corcho, pero para Aztlàn segunda nada.
También demanda la integración de una comisión que ponga orden al servicio de la lancha propiedad de la comunidad, porque por el momento solo beneficia a unos cuantos y el delegado, Armando Gordillo Alvarez, solo trabaja para él.
Paz Cordero informó que es urgente la presencia de brigadas médicas porque hay muchas personas, niños entre ellos, con calentura, diarrea y enfermedades de la piel en los pies.
Afirmó que el centro de salud está cerrado y que el médico que va, solo proporciona consultas de las 10 de la mañana a la una de la tarde y no dispone de medicinas.
Casi es imposible sacar a un enfermo de la comunidad, mencionó, por un viaje de urgencia en lancha cobran hasta 500 y mil pesos afirmó.
Por su parte Carlos Alonso Ruiz López, soy habitante afectado de la ranchería Cruz del Bajío, indignado afirmó que en esa zona de crianza de ganado, nunca el agua llegaba a sus terrenos en julio o en agosto, sino un poco en octubre y noviembre.
Este año comenzó a entrar el agua desde julio por los boquetes del Tintillo que inundó ahora las propiedades de Cruz del Bajío, Pajonal, Corozal, Tintillo, Zapote, Gonzáles y los aztlanes.
“Ya no es culpa de la naturaleza, como dicen, es de los canales que mandó a hacer arbitrariamente el gobierno, sin tomar en cuenta a los que iba a afectar.
“El Gobernador ha mencionado que lo hizo por defender la ciudad y posiblemente lo logre, porque ahí está todo el poder político y económico, todos los que el considera que tiene derecho a vivir bien, sin acordarse de los ciudadanos de todas las comunidades que mencioné como si fuéramos ciudadanos de tercera.
“Está equivocado al pensar que nosotros podemos estar inundados seis meses o más, porque puede ser que al agua no le da la gana salir ni en enero ni en febrero o si siguen abriendo las presas.
“Hemos perdido ya nuestra tierra, el campo del que manteníamos a nuestros animales y hoy nos encontramos rentando pastura, esperando a ver a qué hora baja el agua”, dijo.
Nos estamos reuniendo para buscar la forma de defender nuestro patrimonio afectado por los caprichos de un gobierno que solo ha pensado en unos cuantos y no que en que todos somos iguales.
Teodoro Magaña Cardona, de la ranchería Aztlan quinta Palomillal, también pide al gobierno del estado o al presidente municipal del Centro, el envío de brigadas médicas, porque el centro de salud está inundado y los médicos solo llegan los martes y sin medicinas.
Necesitamos que nos apoyen con brigadas médicas y medicinas, hay mucha gente con calentura, diarreas y enfermos de la piel, no solo por verse en la necesidad de meterse en agua podrida, sino también porque a falta de agua potable están consumiendo el agua del río.
Por su parte la señora María Luisa Sánchez Hernández del Zapote y Tintillo expuso que lo que la mayoría de los pobladores requiere, no solo son despensas, sino también alimento para el ganado, porque ya no hay pastura ni pagada, en ninguna parte y sus animales rápidamente se están enflaqueciendo.
Agregó que muchos de los habitantes de esa zona están desesperados al ver la situación por la que también están pasando sus animales, ya no hay pastura ni a 150, ni a 180 pesos por cabeza y al mes como la habíamos conseguido,
Entrevistados durante una reunión en las oficinas del Movimiento Ecologista de Tabasco, Filiberto Paz Cordero de Aztlan segunda sección, pide al presidente municipal del Centro, Jesús Alí que haga llegar a esa comunidad las despensas semanales que prometió.
A lo mejor si las está enviando, dijo, pero no llegan a todos los habitantes, por lo que solicitó que las hagan llegar a través de los elementos de la Marina, “porque no sabemos dónde quedan”, comentó.
El delegado municipal, solo pide para su comunidad el sector Corcho, pero para Aztlàn segunda nada.
También demanda la integración de una comisión que ponga orden al servicio de la lancha propiedad de la comunidad, porque por el momento solo beneficia a unos cuantos y el delegado, Armando Gordillo Alvarez, solo trabaja para él.
Paz Cordero informó que es urgente la presencia de brigadas médicas porque hay muchas personas, niños entre ellos, con calentura, diarrea y enfermedades de la piel en los pies.
Afirmó que el centro de salud está cerrado y que el médico que va, solo proporciona consultas de las 10 de la mañana a la una de la tarde y no dispone de medicinas.
Casi es imposible sacar a un enfermo de la comunidad, mencionó, por un viaje de urgencia en lancha cobran hasta 500 y mil pesos afirmó.
Por su parte Carlos Alonso Ruiz López, soy habitante afectado de la ranchería Cruz del Bajío, indignado afirmó que en esa zona de crianza de ganado, nunca el agua llegaba a sus terrenos en julio o en agosto, sino un poco en octubre y noviembre.
Este año comenzó a entrar el agua desde julio por los boquetes del Tintillo que inundó ahora las propiedades de Cruz del Bajío, Pajonal, Corozal, Tintillo, Zapote, Gonzáles y los aztlanes.
“Ya no es culpa de la naturaleza, como dicen, es de los canales que mandó a hacer arbitrariamente el gobierno, sin tomar en cuenta a los que iba a afectar.
“El Gobernador ha mencionado que lo hizo por defender la ciudad y posiblemente lo logre, porque ahí está todo el poder político y económico, todos los que el considera que tiene derecho a vivir bien, sin acordarse de los ciudadanos de todas las comunidades que mencioné como si fuéramos ciudadanos de tercera.
“Está equivocado al pensar que nosotros podemos estar inundados seis meses o más, porque puede ser que al agua no le da la gana salir ni en enero ni en febrero o si siguen abriendo las presas.
“Hemos perdido ya nuestra tierra, el campo del que manteníamos a nuestros animales y hoy nos encontramos rentando pastura, esperando a ver a qué hora baja el agua”, dijo.
Nos estamos reuniendo para buscar la forma de defender nuestro patrimonio afectado por los caprichos de un gobierno que solo ha pensado en unos cuantos y no que en que todos somos iguales.
Teodoro Magaña Cardona, de la ranchería Aztlan quinta Palomillal, también pide al gobierno del estado o al presidente municipal del Centro, el envío de brigadas médicas, porque el centro de salud está inundado y los médicos solo llegan los martes y sin medicinas.
Necesitamos que nos apoyen con brigadas médicas y medicinas, hay mucha gente con calentura, diarreas y enfermos de la piel, no solo por verse en la necesidad de meterse en agua podrida, sino también porque a falta de agua potable están consumiendo el agua del río.
Por su parte la señora María Luisa Sánchez Hernández del Zapote y Tintillo expuso que lo que la mayoría de los pobladores requiere, no solo son despensas, sino también alimento para el ganado, porque ya no hay pastura ni pagada, en ninguna parte y sus animales rápidamente se están enflaqueciendo.
Agregó que muchos de los habitantes de esa zona están desesperados al ver la situación por la que también están pasando sus animales, ya no hay pastura ni a 150, ni a 180 pesos por cabeza y al mes como la habíamos conseguido,
