Es el único tema que les queda para poder criticar un día sí y otro también al llamado Gobierno del Pueblo. Los disturbios cometidos la noche del 31 de diciembre, con la quema de tres tiendas de conveniencia y cuatro vehículos, en un lapso de una hora, fueron un acto de provocación en plena celebración de año nuevo.
La rápida movilización de las fuerzas federales y estatales impidió mayores desmanes. Es decir, el operativo fue efectivo, se contuvieron los actos vandálicos, y la situación no pasó a mayores, a pesar de que en redes virtuales sociales los sicarios de la información dieron rienda suelta a una seria de mentiras, como la falsa noticia de que dos policías habían sido asesinados.
Ayer hubo un enfrentamiento a balazos entre presuntos delincuentes en las inmediaciones del tianguis “Jesús Taracena” contiguo al mercado “Pino Suárez”, la policía estatal reaccionó de inmediato y logró detener a tres de ellos y les decomisó armas.
Otra vez se actuó de inmediato, se contuvo la situación de peligro, pero eso no cuenta para los críticos de café y otros actores políticos que se la pasan magnificando los hechos que ocurren en el estado, como si realmente viviéramos en Sinaloa donde el pleito entre facciones del Cártel de Sinaloa es cruento y despiadado.
Uno de ellos es el diputado federal del PRI, Erubiel Alonso Que, quien vocifera que vivimos una “crisis de inseguridad” y pide la presencia inmediata del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana federal, Omar García Harfuch.
Este legislador plurinominal, que por cierto no representa a Tabasco sino a los ciudadanos de la segunda circunscripción nacional, allá le asignó el líder nacional del PRI, “Alito” Moreno, era la única manera de que llegara al Congreso federal, pues por el estado era imposible, aquí el tricolor ya no pinta.
“Nuestro Tabasco está viviendo momentos muy complejos, la iniciativa privada, las familias, los obreros, los transportistas, los campesinos, los productores. Todos quienes vivimos en esta hermosa tierra de hombres y de mujeres trabajadores y leales. Estamos viviendo el momento más complejo de los últimos 30 años en la crisis de inseguridad que nos tiene el gobierno”, dijo con un tono compungido.
Según él, es tiempo de “alzar la voz y de exigir resultados a las autoridades debido a que los ciudadanos viven en la zozobra y el terror”.
UN DISCURSO A CORO
Esas expresiones de “zozobra” y “terror” las usaron machaconamente el PRIAN durante la pasada elección presidencial y estatal en un intento fallido de ganar electores y quitarle votos a Morena.
Todos los días insistieron en ello. Su fallida candidata presidencial en cada plaza pública que iba repetía la misma narrativa que incluía las palabras: miedo, zozobra, terror, infierno, como si todo lo que está pasando fuera exclusivo de los gobiernos de Morena.
Se les olvida que es una herencia maldita de esos malos gobiernos que pactaron con criminales o que tenían delincuentes al frente de la seguridad del país, como Genaro García Luna, quien purga una condena de 38 años de cárcel en Estados Unidos por sus vínculos con el narcotráfico.
A este diputadito no se le escuchó alzar la voz ni exigir resultados cuando atentaron contra el secretario de Seguridad Pública en el gobierno del corrupto Andrés Granier Melo, cuando los zetas eran amos y señores de Tabasco.
Ahí si no decía nada, como tampoco alzaba la voz Lorena Beaurregard ni qué decir Roberto Madrazo, quienes ahora se quieren erigir como paladines de la justicia. Hernán Bermúdez Requena, el exjefe policiaco, acusado de ser el “Comandante H” y líder de “La Barredora”, es de su misma calaña.
No hay que olvidar que Bermúdez trabajó en los gobiernos de Gurría, Madrazo, Andrade, Granier…. Es uno de ellos, no tiene nada que ver con Morena. En 2018, el partido en el gobierno fue cooptado por madracistas y gurriistas, ajenos totalmente a la izquierda, más bien fueron verdugos de opositores cuando eran gobierno.
Quieren que un dos por tres el gobierno de Javier May arregle el cochinero que dejaron durante esos sexenios. Son unos cínicos y desvergonzados. Aquí no hay más complicidades ni tratos en lo oscurito con la maña, sino una respuesta puntual a todas las acciones delictivas.
Es cuestión de tiempo para recomponer la situación y de que Tabasco recupere la paz que los madracistas y gurriistas pactaron con el crimen organizado, porque se está en la dirección correcta. No hay impunidad para quien delinque.
Nos dicen que en el C-4 hay infiltrados de ese grupo. Por eso los delincuentes actúan con tiempo cuando salen a hacer de las suyas, porque el que controla las cámaras se hace de la vista gorda.