Los que desoyeron la propuesta presidencial de que la reforma constitucional para prohibir el nepotismo en cargos públicos y de elección popular, entrara en vigor en los comicios intermedios de 2027, ayer recibieron una contundente respuesta por haber decidido en el Senado aplicarla hasta el 2030, que sonó también a una advertencia.
“Este no es un asunto personal, ni de ambición personal”. “Estamos aquí para servir al pueblo y transformar al país”, les dijo la presidenta Claudia Sheinbaum a quienes en Morena y partidos aliados aspiran a suceder a familiares en el poder.
Esta postura contrasta con la que había asumido la semana pasada, una vez aprobada la reforma constitucional en el Senado.
La mandataria había dicho que respetaba la decisión tomada por la mayoría calificada en el pleno y que lo importante era que ya quedaba establecido en la Constitución federal la prohibición del nepotismo.
Después, declaró que se vería muy mal que políticos sucedieran a familiares en las presidencias municipales que estarán en juego este año en los estados de Durango y Veracruz, y en las 16 gubernaturas en el 2027.
Ayer de plano fue un rotundo no a esas pretensiones. El mensaje fue directo para quienes públicamente han dicho que aspiran a ser candidatos a la gubernatura en Guerrero, Zacatecas y San Luis Potosí, entidades donde habrá elecciones dentro de dos años.
En Guerrero, el senador Félix Delgado Macedonio aspiraba a suceder a su hija, Evelyn Salgado, actual mandataria. Ella ocupó la candidatura en virtud de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación anuló su postulación por no presentar informes de sus gastos de precampaña en los comicios estatales de 2021.
La semana pasada, el senador guerrerense había declarado a los medios que aunque se viera mal el nepotismo se tenía que “escuchar la voz del pueblo”, pues la entrada en vigor de esa prohibición no afectaba sus aspiraciones de ser candidato a la gubernatura.
Sin embargo, ayer cambió de parecer después de la advertencia presidencial. Desistió de esa aspiración.
“Es muy temprano para hablar de candidaturas, cerraré mi pico, respaldo con todo mi amor a Morena, a la 4T y a mi gran presidenta Claudia Sheinbaum. Estoy joven y me puedo esperar hasta el 2033 y con esto cierro el capítulo”.
El senador Saúl Monreal Ávila pretende ser el sucesor de su hermano David en la gubernatura de Zacatecas; y la senadora del PVEM, Ruth González Silva, quiere que su esposo le herede el cargo de gobernador de San Luis Potosí, José Ricardo Gallardo Carmona.
Hasta ahora, ambos no han dicho nada, pero ya hicieron acuse de recibo del mensaje presidencial.
Esa manita de puerco que le hicieron a la doctora, como se puede apreciar, tendrá consecuencias para quienes privilegiaron el interés político por encima del espíritu de la iniciativa.
UNA LUCHA DE
PRINCIPIOS Y
AMBICIONES
Esa fue la razón de fondo por la que la reforma constitucional contra el nepotismo entrará en vigor hasta 2030, como se aprobó en el Senado. La minuta fue enviada a la Cámara de Diputados donde puede ser modificada y establecer la fecha original de la entrada en vigor en las elecciones de 2027.
Si se modifica, tendrá que regresar al Senado para hacer el cambio o modificarla de nuevo tal y como fue aprobada en un principio, sólo que ahora la presión es mayor para quienes acordaron pasarse por alto la propuesta original.
La presidenta requiere un Senado que la respalde al cien por ciento no que le juegue las contras con el argumento de que se requieren los votos del PVEM para obtener la mayoría calificada para modificar la Constitución federal.
En todo caso demuestra incapacidad de negociación de quien dirige la llamada cámara alta, o bien, sólo sabe actuar conforme a las reglas del viejo PRI, lo que resulta peor.
Es inmoral ceder a ese tipo de chantajes porque no se privilegia el interés general, sino se pretende que una familia detente el poder en un estado o en un municipio por lo menos un trienio o sexenio más.
El mensaje presidencial ha sido más que claro: “Entonces a todos aquellos que son familiares de quien está ahora en un puesto de elección popular, no es un asunto de ambición personal. Nosotros somos parte de un movimiento de transformación.
Y no puede ser que la ambición personal esté por encima de la transformación.
Eso nunca porque entonces se vuelve un asunto individual”.
Casualmente, es en el Senado donde está el principal responsable de que no se prohibiera el nepotismo en las próximas elecciones. Una raya más al tigre.