Como la inseguridad ya no impacta ni atemoriza a la población, los adversarios de este gobierno enfocaron sus baterías al cierre de negocios para responsabilizar a las autoridades del estado de esas quiebras y acusar de que no hay ningún tipo de apoyo a los empresarios.
En esa estrategia interviene también la dirigenta de la Canaco, Leydi Susana León Sánchez, quien sin aportar los nombres de los establecimientos, asegura que “en los últimos meses” han cerrado sus puertas 330 negocios.
Hace un par de semanas, León Sánchez, había dicho que eran 300 los negocios que bajaron sus cortinas, cifra que fue refutada por la secretaria de Turismo y Desarrollo Económico, Katia Ornelas Gil por considerarla irreal.
En sus más recientes declaraciones, Leydi Susana le añadió 30 más, pero como cabeza del comercio organizado debe tener, como se dice, “los pelos de la burra en la mano”, para ponerle nombre a todas las empresas que han dejado de operar, según ella.
Hasta ahora no lo ha hecho. Es solo su dicho, que es tomado como una verdad irrefutable por ser la lideresa de los comerciantes organizados, principalmente por los detractores del llamado “Gobierno del Pueblo” que aprovechan el “dato” para lanzarle toda clase de ataques y críticas.
En esta campaña sucia intervienen, para variar, medios afines al grupo político que anteriormente desgobernaba el estado. Tanto es su afán por desacreditar a este gobierno, que un medio radiofónico publicó un gráfico de los supuestos comercios que han cerrado.
En esa lista están incluidos RBurguer y Colosso, dos restaurantes del Grupo Rodizio, cuyos propietarios anunciaron que el cierre se debe a que se enfocarán a otros proyectos. Obviamente eso no lo dicen porque entonces su crítica se desvirtúa, pierde fuerza y le resta credibilidad.
Incluyeron además a un restaurante denominado “Sirleon” y en las propias redes sociales de ese medio radial les aclaran que ese lugar tenía tiempo de haber cerrado sus puertas.
En su portal de noticias, destacan una nota en la cual la CANIRAC informa que van 15 restaurantes cerrados que han generado la pérdida de 250 empleos. Cuando uno lee la información completa, se puede advertir que, deliberadamente, minimizan un dato relevante: en ese mismo periodo han abierto 10 establecimientos. Y dicen que son objetivos.
Un gobierno no es directamente responsable de las quiebras, ya que estas suelen estar influenciadas por factores como la competencia, la gestión empresarial, las condiciones del mercado o eventos externos, como crisis económica o pandemias.
Lo sería si aplicara impuestos excesivos o pagos de derechos o ejerciera un control de precios, pero no es el caso. La obra pública anunciada para el segundo semestre ayudará a reactivar la economía, han dicho las autoridades.
El actual panorama económico de Tabasco está afectado por una contracción de la actividad petrolera y a los pasivos que la empresa arrastra con contratistas y proveedores, y eso ha afectado al sector privado que está supeditado a la derrama petrolera.
Tabasco depende en gran medida de la industria petrolera, que representa aproximadamente el 40% de su PIB.
LOS BISSNES DEL BRIBÓN
La finalización de proyectos de infraestructura, como la refinería de Dos Bocas, ha generado una contracción económica significativa. En el primer semestre de 2024, la actividad económica de Tabasco cayó un 5% respecto al mismo periodo de 2023, con una disminución del 8.9% en la producción industrial, especialmente en la construcción (-23.4%) y la minería petrolera (-5.6%).
La reducción de la actividad petrolera y la falta de pagos de Pemex a proveedores han paralizado más del 80% de las actividades dependientes del sector, afectando directamente a pequeñas y medianas empresas (mipymes) que proveen bienes y servicios a la industria.
Los negocios también tienen responsabilidad en su gestión. Decisiones internas, como mala administración, deudas excesivas o falta de adaptación al mercado, suelen ser factores en las quiebras.
Hace unos días, el gobierno estatal informó que se han creado 38 mil fuentes de empleo y en el segundo semestre del presente año se tiene previsto que se abran otras 14 mil más, con lo que se superará la cifra de 45 mil que se llegaron a generar con la construcción de la refinería de Dos Bocas, en Paraíso.
Ese municipio vivió un auge económico mientras duró la construcción de la refinería, pero una vez que concluyó, la actividad se contrajo y, por consecuencia, varios negocios tuvieron que cerrar sus puertas por incosteables. Es la ley de la oferta y la demanda.
Los adversarios y detractores no argumentan sus críticas. Lo suyo no es el análisis bien sustentado, sino la descalificación, el ataque artero. Como dice el dicho: calumnia que algo queda. Así ha pasado en la mayoría de los casos. Lo vimos con el tema de la inseguridad. Bueno, casi hasta elogiaban a los delincuentes por hacer de las suyas y condenaban al gobierno por el “infierno” en que se había convertido Tabasco.
Ahora el tema de moda es el cierre de negocios, una oportunidad más para quemar en leña verde al gobierno. Mañana seguramente será otro y así sucesivamente. A eso se dedican, por resentimiento, incompetencia, mediocridad o porque no tienen nada mejor qué hacer, como el bufón metido a analista político, Manuel Andrade.
A propósito de restaurantes, habría que preguntarle al gordo Andrade si es cierto lo que dicen las malas lenguas: que Los Bisquet de Obregón eran suyos, que los puso a nombre del que era su secretario particular Carlos Madrazo, quien fungió como prestanombre, pero que al final se quedó con ellos, que a partir de esa transa ahora se llaman “Los Bissnes del Bribón” ¿Será Cierto?