Con un ambiente digno de Hollywood, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, encabezó la representación mexicana en el sorteo oficial de la Copa Mundial de la FIFA 2026, celebrada en el Kennedy Center de Washington D.C. El evento marcó el inicio formal de la organización del torneo que, por primera vez en la historia, se llevará a cabo de manera conjunta en tres naciones: México, Estados Unidos y Canadá.
La presidenta Sheinbaum coincidió en el escenario con el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro de Canadá, Mark Carney, en un acto de unidad que simboliza la colaboración tripartita. Los tres líderes fungieron como anfitriones de honor y posaron juntos para la tradicional fotografía, mostrando las cintas con los nombres de sus países como cabezas de serie del torneo.
El orgullo mexicano y el grito de “¡viva México!”
Durante su intervención, la presidenta Sheinbaum expresó el profundo orgullo de la nación por ser sede mundialista por tercera ocasión, un hito histórico para cualquier país.
"Estamos orgullosos y orgullosas de recibir por tercera vez la Copa Mundial. México es un país maravilloso, y millones visitarán la nación; tenemos un pueblo extraordinario y trabajador. Algo especial, disfrutamos de un juego de pelota desde años ancestrales", declaró Sheinbaum.
El momento más emotivo y patriótico de la noche para los aficionados mexicanos ocurrió cuando la mandataria fue la encargada de sacar de los bombos el nombre de la Selección Mexicana. Al revelar la posición del equipo en el Grupo A para la primera ronda del certamen, Sheinbaum exclamó con júbilo: "¡Viva México!", desatando el aplauso de los presentes.
Liderazgo global y asistencia plurinacional
“Estamos orgullosos de recibir por tercera vez la Copa Mundial; millones visitarán México.”
La ceremonia fue inaugurada por Gianni Infantino, presidente de la FIFA, quien dio una cálida bienvenida a los tres mandatarios. Infantino destacó que este Mundial será "mucho más que un evento deportivo", al ser el primero con tres anfitriones, 16 ciudades sede y 48 selecciones participantes.
En el sorteo estuvieron presentes, además de la presidenta Sheinbaum, varios líderes mexicanos de las ciudades sede. Entre ellos se encontraban Clara Brugada, jefa de gobierno de la Ciudad de México —ciudad que albergará partidos en el Estadio Azteca (recientemente renombrado Estadio Banorte), el primer inmueble en el mundo en recibir tres Copas del Mundo—, así como Samuel García, gobernador de Nuevo León, y Pablo Lemus, gobernador de Jalisco.
El presidente estadounidense, Donald Trump, también se dirigió a los asistentes, reflexionando sobre la evolución del fútbol en su país y el entusiasmo que rodea al deporte.
El evento de gala concluyó con un espectáculo musical de primer nivel, en el que el cantante británico Robbie Williams y la artista estadounidense Nicole Scherzinger interpretaron la canción Desire, el himno oficial de la FIFA, cerrando con broche de oro la ceremonia que marca la cuenta regresiva hacia el Mundial 2026.
