
Las acusaciones, presentadas de manera anónima el pasado 28 de abril, señalan supuestos actos de corrupción, como la asignación de puestos clave a personas sin experiencia, el uso de recursos oficiales para fines personales, y la solicitud de dinero al personal de la fiscalía. Gómez Piedra calificó estos señalamientos como "infundios" y "totalmente falsos", asegurando que se trata de una campaña para empañar su imagen y desacreditar su labor.
En el marco de la entrevista, el fiscal también denunció un acto de sabotaje ocurrido en sus oficinas, donde fue manipulada una computadora que contenía un informe dirigido a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. A través de las cámaras de seguridad se identificó a los presuntos responsables, ya denunciados ante las autoridades.
En cuanto al avance del caso Ayotzinapa, Gómez Piedra detalló que durante su gestión se han registrado logros sin precedentes. Entre ellos, la exploración de 43 sitios en el estado de Guerrero, lo que representa un incremento del 800% en comparación con los ocho años anteriores. Asimismo, el número de grupos de búsqueda aumentó de uno a nueve.
El fiscal también reportó que se ha duplicado el número de personas detenidas, pasando de 51 a 120, incluyendo a exfuncionarios, militares, elementos policíacos y miembros del grupo delictivo Guerreros Unidos. Además, mencionó la reactivación de 50 órdenes de aprehensión y la judicialización de 45 causas penales.
Finalmente, Gómez Piedra subrayó que continuará con su labor de investigación y litigación pese a los intentos de desestabilizar su gestión, y reiteró que las denuncias en su contra no tienen sustento probatorio alguno.