 Esa pequeña parte que aportan los bancos, la deducen de impuestos. Pues ya no la van a deducir a partir del próximo año”, señaló la mandataria, al destacar que la medida formará parte del paquete que será entregado al Congreso
                                        
                                        Esa pequeña parte que aportan los bancos, la deducen de impuestos. Pues ya no la van a deducir a partir del próximo año”, señaló la mandataria, al destacar que la medida formará parte del paquete que será entregado al Congreso
                                    La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó que, a partir del próximo año, los bancos ya no podrán deducir de impuestos las aportaciones que realizan al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), organismo que sustituyó al Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa).
Durante su conferencia “La Mañanera de Pueblo”, Sheinbaum explicó que esta medida se incluye en el Paquete Económico 2026, el cual será presentado el lunes 8 de septiembre. Precisó que el titular de la Secretaría de Hacienda, Edgar Amador, dará a conocer los detalles el martes siguiente.
La mandataria señaló que los bancos aportan una fracción mínima al IPAB y que, hasta ahora, podían deducirla de impuestos. Con la nueva disposición, esa deducción quedará eliminada. Se estima que la medida permitirá recuperar alrededor de 10 mil millones de pesos.
“No puede ser que haya deducción de impuestos de una aportación destinada a cubrir la deuda del Fobaproa. Tienes que pagar impuestos”, afirmó Sheinbaum.
Sheinbaum aseguró haber dialogado previamente con algunos representantes del sector bancario y confió en que respaldarán la iniciativa. La propuesta quedará integrada en la Ley de Ingresos 2026.
El anuncio revive el debate en torno al Fobaproa, creado en 1995 durante la presidencia de Ernesto Zedillo como mecanismo para rescatar al sistema financiero tras la crisis bancaria. La conversión de pasivos privados en deuda pública generó fuerte oposición social, pues hasta la fecha el país mantiene obligaciones que se prevé se paguen hasta 2070.
 
                             
                                                     
                                                     
                                                     
                                                     
                                                     
                                                     
                     
                     
                     
                     
                     
                             
                            