Refrescos y bebidas embotelladas ya muestran incrementos en el precio final, con ajustes visibles en anaqueles que impactan el gasto cotidiano de las personas consumidoras.
Los precios de refrescos y bebidas embotelladas de la empresa Coca-Cola comenzaron a incrementarse en distintos puntos del país, con ajustes que en algunos casos alcanzan hasta 20% por unidad, dependiendo de la presentación y la zona de venta.
El aumento se aplicó en vísperas de la entrada en vigor de un nuevo ajuste al impuesto especial a bebidas azucaradas previsto para 2026, por lo que el impacto económico ya se refleja desde ahora en el precio final que pagan las personas consumidoras.
El encarecimiento afecta especialmente a envases de consumo familiar y presentaciones individuales de alta rotación, lo que repercute tanto en el presupuesto de los hogares como en los márgenes de pequeños comercios y tiendas de barrio.
El alza ya se siente en el bolsillo antes de que inicie el nuevo esquema fiscal.
Para la ciudadanía, este cambio implica destinar más recursos a productos de consumo frecuente o reconsiderar la cantidad y frecuencia de compra, en un contexto donde otros bienes básicos también han registrado incrementos recientes.
#TomaNota:
• Aumento registrado: hasta 20% según presentación
• Aplica desde: diciembre de 2025
• Impacta en: refrescos y bebidas azucaradas
• Contexto: ajuste previo a cambios fiscales en 2026
