Nativa del municipio de Comalcalco a temprana edad abrazo el deporte, que en ese tiempo era un tabú practicarlo por las mujeres, pero con su disciplina, tesón y calidad obtuvo triunfos locales, nacionales e internacionales, donde se codeo con los mejores exponentes de la disciplina en ambas ramas.
También logro su carnet profesional y en su tierra de origen recibió el Premio Estatal del Deporte.
Se retiro con una brillante trayectoria y después se preparó como instructora profesional con los más altos estándares de calidad, que llamó la atención de personalidades importantes y varios de ellos la contrataron como su preparadora personalizada.
También se caracterizó por defender sus derechos, por esa razón se enfrentó al eterno presidente de la Federación Mexicana de Fisicoconstructuvismo y Fitness, Francisco Cabezas Gutiérrez. Fue una mujer vertical, leal, de temple y una apasionada de la actualización o capacitación deportiva.
Violeta Vázquez acuñó una sustancial carrera deportiva, que prácticamente la coloca como la mejor deportista de todos los tiempos del deporte convencional local, de una amplia lista de mujeres del pretérito y del presente quienes representaron al país en los diversos certámenes cosmopolitas.
Actualmente el cultivo del músculo en la rama femenil se diversificó y tiene un crecimiento sostenido que incursionan en los diverso en eventos a lo largo y ancho del país; porque los movimientos feministas permearon de una manera transcendental en deporte nacional y mundial.
La tabasqueña dejó un importante legado, porque además de sus éxitos y triunfos, se convirtió en un ejemplo a seguir, pues aún a las adversidades que se enfrentó nunca se desanimó.
Ahora solo queda rendirle tributo, agradecerle todo su aporte al deporte y desearle Q.E.P.D. El poder es el poder.